Teoría cuyo concepto fundamentales el “función”, que se refiere a la relación de un elemento dentro del conjunto. Dentro del funcionalismo sociológico se ha dado a la noción un sentido más específico: por función se entiende la aportación de un elemento al mantenimiento del conjunto. El concepto de función se complementa con el de disfunción que define la aportación de un elemento a la desintegración del conjunto o parte de él.
Cuando en un conjunto social predominan las relaciones funcionales, se dice que está integrado, y en la medida en que aparecen manifestaciones disfuncionales se halla en conflicto.
Funcionalistas destacados han sido Malinowski en antropología y Spencer y Durkheim en sociología, entre otros.
Para el funcionalismo, todo sistema social, tiene ciertas necesidades y ciertos requisitos que deben ser satisfechos en alguna medida para que la sociedad funcione. En consecuencia, toda institución debe ser explicada en términos de su funcionalidad respecto de la satisfacción de tales necesidades, y toda acción social debe orientarse al logro de esa funcionalidad mediante la eliminación de los desajustes de los elementos que forman parte del todo.
La preocupación fundamental del funcionalismo es el mantenimiento o autoconservación de la sociedad. Esta preocupación le ha llevado a hacerse la pregunta por los condicionamientos fundamentales o necesidades vitales que toda sociedad tiene que cumplir, si quiere subsistir. Si la característica del funcionalismo es su preocupación por la estabilidad, también lo es la respuesta que da a este problema. Esta respuesta es fundamentalmente a través de los valores. Para el funcionalismo, la sociedad funciona bien cuando todos sus elementos se encuentran integrados por la aceptación de unos valores comunes y por lo tanto sigan las normas que de ellas se derivan, y realizan los roles que les asignan.
(AA.VV. Diccionario de sociología Universidad Rey Juan Carlos . ESIC Editorial. Madrid. 2004)